5. ¿Cada cuándo y hasta cuándo?
Otra idea clave de Espai en Blanc es que no quiere quedar prisionero de la periodicidad ni del activismo. Por eso es vital evitar cualquier compromiso (publicaciones periódicas, cursos anuales, mantenimiento de un local, etc) que pueda forzar a “producir” cuando no se tiene nada que decir o no se dan las circunstancias para hacerlo. En este sentido, Espai en Blanc parte de dos criterios básicos: el primero, que vale más un buen acontecimiento una vez al año que una permanente actividad carente de interés (lo bueno si breve dos veces bueno…); el segundo, que se valora más la continuidad de un contexto enriquecedor y valiente que la espectacularidad de sus resultados inmediatos (ley del gota a gota). Así pues, y para resumir, cada cuando sea y tanto tiempo como se pueda…